Desde los confines de su pequeña lancha, Roberto ha sido testigo del ascenso y la caĂda de la industria petrolera de Venezuela. Durante una dĂ©cada, ha transportado a trabajadores desde las orillas del Lago de Maracaibo hasta las vastas instalaciones que alguna vez fueron la joya de la corona de la compañĂa más importante del paĂs.
Pero a medida que la industria ha colapsado, también lo ha hecho su modo de vida.
"Todo cambiĂł... se acabĂł", dijo Roberto a OCCRP, que pidiĂł usar un seudĂłnimo por miedo a represalias.
La compañĂa petrolera estatal PetrĂłleos de Venezuela, S.A. (PDVSA), que en su dĂa fue el motor de una de las economĂas más fuertes de SudamĂ©rica, se ha hundido por la mala gestiĂłn y la corrupciĂłn. Ejecutivos petroleros y sus secuaces han saqueado por lo menos 11 mil millones de dĂłlares de la compañĂa en una serie de escándalos, incluyendo desfalcos, sobornos y fraudes monetarios.
Ahora, una investigaciĂłn periodĂstica ubicĂł las fortunas que algunos de ellos han ocultado en Suiza. Datos bancarios filtrados revelan que más de 20 venezolanos vinculados a cuatro esquemas de corrupciĂłn de PDVSA acumularon a lo largo de los años activos por más de 273 millones de dĂłlares en 25 cuentas de Credit Suisse, y posiblemente mucho más. En algunos casos, Ă©stas contenĂan cantidades más altas de lo que hasta ahora las autoridades han hecho pĂşblico.
Con documentos judiciales de España, Estados Unidos y Andorra, OCCRP identificĂł a los principales implicados en estas tramas de soborno y cohecho. Los reporteros revisaron miles de registros bancarios para encontrar dĂłnde habĂan escondido su dinero, descubriendo al menos una docena de cuentas de Credit Suisse que nunca han sido nombradas en documentos judiciales. Entre ellas habĂa cuentas bancarias de 12 socios y familiares de personas implicadas en uno de los fraudes.
Casi todas las cuentas se abrieron entre 2004 y 2015, lo que cubre el perĂodo cuando se produjeron estas tramas de corrupciĂłn en PDVSA. Algunas permanecieron abiertas incluso despuĂ©s de que los titulares de las cuentas fueran arrestados, acusados, extraditados, se declararan culpables de graves delitos financieros o que fueran señalados en medios por dar o recibir sobornos.
La investigaciĂłn Suisse Secrets
Suisse Secrets es un proyecto periodĂstico colaborativo basado en una filtraciĂłn de datos bancarios del gigante del sector bancario Credit Suisse.
Los crĂticos dicen que el papel de Credit Suisse al facilitar tramas de corrupciĂłn en Venezuela y en otros paĂses no es solo un problema interno. TambiĂ©n está relacionado con las leyes suizas que fomentan el secreto bancario extremo y castigan a quienes lo denuncian.
"El sistema bancario suizo sigue siendo uno de los destinos favoritos, no sĂłlo para las ganancias de esquemas de soborno masivo como los que involucran a PDVSA, sino para el uso de compañĂas como PDVSA como vehĂculos para el lavado de ganancias criminales", dijo Alexandra Wrage, presidenta de la organizaciĂłn anticorrupciĂłn sin ánimo de lucro TRACE.
Pero mientras las Ă©lites corruptas se han llenado los bolsillos, los venezolanos de a pie han pagado el precio. Desde 2013 la economĂa se derrumbĂł, con tasas de pobreza y desempleo disparadas, mientras que la hiperinflaciĂłn devora los salarios y los ahorros de los que aĂşn tienen la suerte de tener un trabajo.
El lago de Maracaibo, una laguna en la costa noroeste de Venezuela, es un recuerdo crudo de los costos de esa corrupciĂłn. Cuando un periodista lo visitĂł en noviembre, botellas de refresco flotaban en el agua sucia y una muñeca de Hello Kitty cubierta de lodo negro habĂa sido arrastrada a la orilla. Muchas de las gigantescas instalaciones de PDVSA a lo largo de la costa están ahora abandonadas y cubiertas de maleza.
Roberto, que antes ganaba lo suficiente para llevar una vida estable de clase media, señalĂł que ahora apenas logra alimentar a su familia. Está pensando en unirse a los 6 millones de venezolanos que han salido del paĂs desde 2015.
"¿De qué vale tener patria si el pueblo está pasando necesidad?", dijo. "¿Qué hago con tener la familia unida si no tengo qué darle de comer?”
Credit Suisse dijo que su personal no facilitĂł de forma consciente actividades corruptas de sus clientes, y señalĂł que, junto con otras instituciones, ha aplicado polĂticas más estrictas para combatir los delitos financieros.
“En consonancia con las reformas financieras del sector y en Suiza, Credit Suisse ha adoptado una serie de importantes medidas adicionales en la última década, incluyendo inversiones considerables en la lucha contra la delincuencia financiera”, indicó el banco en una declaración a OCCRP y a otros socios.
“En todo el banco, Credit Suisse sigue reforzando su marco de cumplimiento y control, y como hemos dejado claro, nuestra estrategia pone la gestión de riesgo en el centro de nuestro negocio”.
Oleoducto corrupto
A más de 7.300 kilómetros del Lago de Maracaibo, al otro lado del Océano Atlántico, un antiguo alto funcionario del Ministerio de Petróleo de Venezuela, acusado de saquear PDVSA, vive en una mansión con piscina de 2 millones de euros en las afueras de Madrid.
Hace años que Nervis Villalobos no siente el calor sofocante de su ciudad natal, a la orilla del lago, pues no puede volver. Enfrenta cargos de corrupción y lavado de dinero en España y en Andorra, asà como en Estados Unidos y Venezuela, que han solicitado su extradición.
Como intermediario clave en la industria petrolera de Venezuela, Villalobos presuntamente recibiĂł sobornos de empresas estadounidenses a cambio de ayudarlas a conseguir lucrativos contratos con la petrolera nacional. Fiscales españoles afirman que Villalobos actuĂł como testaferro de Rafael RamĂrez, que fue presidente de PDVSA, exministro de EnergĂa y aliado del difunto lĂder venezolano Hugo Chávez.
Documentos judiciales españoles afirman que el cargo de Villalobos lo convertĂa en la segunda persona con más poder en el Ministerio de EnergĂa de Venezuela, donde trabajĂł en varios puestos de responsabilidad entre 2001 y 2006. Incluso despuĂ©s de que Villalobos se marchara para convertirse en contratista se "paseaba por PDVSA como si fuera un alto ejecutivo", dijo una fuente judicial española que hablĂł bajo condiciĂłn de anonimato por no estar autorizada a referirse al caso.
“Nervis te ahogarĂa el negocio si no le pagabas. Para sobrevivir, te tenĂas que aliar con Nervis [Villalobos]", declarĂł a fiscales españoles Mathias Krull, un banquero alemán-venezolano condenado en Estados Unidos por lavado de dinero de PDVSA, en un documento obtenido por OCCRP.
Para 2008, Villalobos ya tenĂa una reputaciĂłn internacional por sus negocios sucios. Un informe de 11 páginas de debida diligencia, que la policĂa hallĂł en archivos de Credit Suisse, esbozaba mĂşltiples acusaciones de corrupciĂłn contra Ă©l, incluido un supuesto soborno de 2,7 millones de euros vinculado a un proyecto hidroelĂ©ctrico que se repartiĂł con RamĂrez.
Pero incluso esto no impidió que Credit Suisse trabajara con él.
En 2009, los fiscales españoles indican que poco después de que un banco suizo lo eliminara de su lista de clientes por indicios de corrupción con sus cuentas, el Credit Suisse en Mónaco le abrió una cuenta a Villalobos. Asà que simplemente transfirió el dinero a su cuenta de Credit Suisse.
Los fiscales afirman que el venezolano canalizĂł casi 25 millones de dĂłlares y 11,5 millones de euros a travĂ©s de esa cuenta, que fue cerrada en 2012. Parte del dinero procedĂa supuestamente de sobornos pagados por empresas españolas por contratos energĂ©ticos, que el propio reporte de debida diligencia habĂa ya señalado como sospechosos.
Incluso la informaciĂłn personal proporcionada por Villalobos era problemática: cuando los periodistas buscaron la direcciĂłn de Caracas que dio para la cuenta, descubrieron que no existĂa.
Luego, en 2011, la filial suiza de Credit Suisse le abriĂł otra cuenta. Un mensaje de texto enviado en septiembre de ese año muestra que el contratista petrolero venezolano Abraham Shiera Bastidas intervino a nombre de Villalobos, despuĂ©s de que el banco tuviera dudas sobre el origen del dinero que el exfuncionario querĂa trasladar a Suiza. Bastidas despuĂ©s se declarĂł culpable de sobornar a funcionarios venezolanos, incluyendo a Villalobos, para obtener contratos de PDVSA.
"La institución no ha aceptado el palo", escribió Shiera a Villalobos en Blackberry Messenger, según documentos judiciales, usando jerga venezolana para referirse a millones. "Me piden facturas y órdenes de compra. Ya las presenté. Espero que se resuelva mañana".
El mensaje no nombraba el banco suizo al que se referĂa Shiera. Pero los datos bancarios filtrados de Suisse Secrets muestran que Credit Suisse abriĂł una cuenta para Villalobos solo cinco dĂas despuĂ©s.
Al parecer, Villalobos podrĂa haber usado esta cuenta para recibir sobornos.
Una imputaciĂłn de Estados Unidos describe cĂłmo Shiera y su cĂłmplice, Roberto RincĂłn, pagaron 27 millones de dĂłlares en una cuenta suiza conjunta propiedad de Villalobos y del venezolano Luis Carlos de LeĂłn, quien en 2018 admitiĂł ser parte del esquema de sobornos de PDVSA. Este dinero, dice, fue luego canalizado a cuentas pertenecientes a Villalobos y de LeĂłn mantenidas en otro banco suizo no identificado.
Los datos bancarios filtrados muestran que Villalobos y De LeĂłn abrieron cuentas en Credit Suisse el mismo dĂa de septiembre de 2011, como se menciona en la acusaciĂłn. En menos de dos años, la cuenta de Villalobos acumulaba activos por 9,5 millones de francos suizos mientras que la de De LeĂłn tenĂa al menos 22,6 millones de francos suizos en activos.
Los abogados de Villalobos y De LeĂłn no contestaron a las preguntas que se les enviaron.
Credit Suisse no respondiĂł a las preguntas sobre Villalobos u otros venezolanos, pero los abogados del banco rechazaron la afirmaciĂłn de que la instituciĂłn tenĂa procedimientos inadecuados de debida diligencia o facilitaba delitos financieros.
"CS no tolera ni apoya la evasiĂłn de impuestos, el lavado de dinero u otras actividades ilegales, cuenta con estrictos mecanismos de control y revisa y desarrolla sus polĂticas de forma continua", dijo en una carta la firma de abogados del banco, Latham & Watkins LLP.
Las nuevas cuentas
En total, los reporteros identificaron diecisĂ©is cuentas de Credit Suisse que contenĂan por lo menos 162,9 millones de francos suizos pertenecientes a siete personas que fueron condenadas o acusadas de estar involucradas en este esquema de sobornos de PDVSA. En un caso, los datos parecen arrojar nueva luz sobre una investigaciĂłn en curso.
JosĂ© Roberto RincĂłn Bravo es el hijo de Roberto RincĂłn, quien en 2016 admitiĂł en un tribunal estadounidense haber sobornado a funcionarios de PDVSA junto a Shiera. La policĂa española detuvo a RincĂłn Bravo en 2018 por sospechas de lavado de dinero de PDVSA. Le confiscaron a Ă©l y a su familia joyas, relojes, coches deportivos y una finca de 400 hectáreas cerca de Madrid con varias casas y un tentadero.
Sin embargo, RincĂłn Bravo aĂşn no ha sido imputado en el caso y ha negado pĂşblicamente estar involucrado en los asuntos corruptos de su padre. En 2019 dijo a El Confidencial, un periĂłdico digital español, que sus costosos accesorios procedĂan "del trabajo, de años de ahorro."
Pero los datos de Credit Suisse muestran que Rincón Bravo y su padre eran titulares de cuatro cuentas conjuntas que concentraron al menos 93 millones de francos suizos y que no han sido nombradas en ningún documento judicial hasta ahora. Tres de las cuentas alcanzaron su máximo de tenencia en diciembre de 2015, apenas dos semanas antes de que el padre de Rincón Bravo fuera detenido.
En Credit Suisse habĂa varias cuentas conjuntas vinculadas a personas implicadas en la trama y a sus familiares. Dos pertenecĂan a personas que trabajaban estrechamente con RincĂłn y Shiera como contratistas de PDVSA. En total, los reporteros encontraron que siete individuos asociados con los sospechosos tenĂan cuentas, que alcanzaron a tener un máximo de 20,1 millones de francos suizos.
Y esas no fueron las Ăşnicas cuentas vinculadas a los esquemas de corrupciĂłn de PDVSA que OCCRP encontrĂł en los datos bancarios.
Al revisar los registros bancarios filtrados en busca de detalles sobre Villalobos, los reporteros también encontraron a otras personas relacionadas con otro fraude masivo en el que estuvo involucrado el exfuncionario. Esta trama usó facturas falsas para desviar unos 2.000 millones de dólares de la riqueza petrolera venezolana, que supuestamente se blanquearon a través de la Banca Privada d'Andorra, un pequeño principado situado entre España y Francia.
Una vez más, se acusa a Villalobos de usar su posiciĂłn para obtener sobornos de empresas extranjeras a cambio de contratos de PDVSA. Esta vez trabajĂł supuestamente con Diego Salazar Carreño, un primo del exministro de PetrĂłleo, RamĂrez. Salazar está ahora en prisiĂłn en Venezuela por corrupciĂłn, mientras que Villalobos fue acusado en Andorra por este esquema. Hasta ahora ha logrado evitar la extradiciĂłn.
Dos de los presuntos cĂłmplices de Salazar tambiĂ©n eran clientes de Credit Suisse, segĂşn los datos bancarios filtrados. Uno de ellos, el magnate venezolano de los seguros Omar FarĂas, tenĂa una cuenta con 4 millones de francos suizos. Cuando abriĂł su cuenta, World Check - una base de datos de debida diligencia - ya tenĂa un perfil sobre Ă©l, que incluĂa varios artĂculos donde se planteaban interrogantes sobre su fortuna "milagrosa" y "escandalosa", asĂ como su relaciĂłn con Chávez.
Otro intermediario, José Luis Zabala, tuvo por lo menos 7,5 millones de francos en el banco.
Ninguno contestĂł a los cuestionarios que les enviaron.
Un caso de soborno cercano a casa
Un caso más reciente es el de Naman Wakil, que fue detenido en Miami en 2021 acusado de negocios corruptos con Venezuela. Entre 2010 y 2017, los fiscales estadounidenses indican que sobornó para conseguir al menos 30 millones de dólares en contratos con PDVSA y unos 250 millones de dólares con la empresa estatal de alimentos de Venezuela.
Las autoridades dicen que Wakil invirtiĂł parte de su riqueza mal habida en bienes raĂces en Miami, incluyendo apartamentos frente al mar y en lujosas torres en el centro de la ciudad. Otros millones fueron supuestamente derrochados en un yate y un aviĂłn.
Los expedientes judiciales dicen que los fondos robados se blanquearon a travĂ©s de cuentas en Estados Unidos, las Islas Caimán, Panamá y Suiza. OCCRP descubriĂł que Wakil abriĂł una cuenta en Credit Suisse en septiembre de 2011, que tres meses despuĂ©s tenĂa más de 3,7 millones de francos suizos.
"Los bancos suizos fueron los más frecuentes" en las tramas de corrupciĂłn de Venezuela, dijo el abogado y exfiscal estadounidense Michael Naddler, que trabajĂł en algunos de los casos. "Sean cĂłmplices o no, ellos, te dirĂa, permitieron que sucediera mucho de esto".
"Tradicionalmente, los bancos suizos han sido los que más y mejor guardan los secretos", añadió Naddler.
Graham Barrow, un experto independiente en delitos financieros, dijo que se fomenta la corrupciĂłn cuando los bancos permiten que los fondos robados entren al sistema financiero mundial.
"Si los bancos no dejan de conspirar con esta gente para legitimar fondos que nunca deberĂan entrar legĂtimamente en el sistema, nunca vamos a cambiar", afirmĂł. "La gente de Venezuela, Kazajistán y otros paĂses seguirá siendo pobre".
CorrupciĂłn y crisis
Nadie sabe exactamente cuánto dinero fue saqueado de la petrolera nacional de Venezuela. Las estimaciones oscilan entre 11.000 y 300.000 millones de dólares sólo entre 2002 y 2014, tras la llegada de Chávez al poder y en medio de la bonanza de los precios del petróleo.
Pero los efectos del colapso econĂłmico han sido catastrĂłficos. La inflaciĂłn de los precios de los alimentos alcanzĂł un "asombroso" 1.700% en 2020, segĂşn el Programa Mundial de Alimentos, y la tasa de pobreza alcanzĂł el 94% el año pasado. Mientras que Venezuela se hundĂa en una crisis humanitaria, el dinero del petrĂłleo que deberĂa haber servido para pagar escuelas y hospitales, se movĂa hacia cuentas en el extranjero.
"En los Ăşltimos 18 años, PDVSA fue de mal en peor. De lo inverosĂmil a lo absurdo", dijo CĂ©sar Mata-GarcĂa, un abogado venezolano especializado en la industria energĂ©tica.
El efecto de la corrupciĂłn de PDVSA es evidente en las deterioradas ciudades fantasma de la orilla oriental del Lago de Maracaibo, donde las calles llenas de trabajadores petroleros y sus familias han sido reemplazadas por cementerios de coches abandonados. En toda la zona, una alerta constante de la decadencia de la empresa se filtra sin cesar en el agua.
"Se estima que entre 60 y 80 barriles se filtran diariamente desde los pozos y las tuberĂas hacia el lago", dijo un alto empleado de PDVSA al OCCRP. PidiĂł el anonimato por miedo a represalias.
David, un buzo especializado en el mantenimiento de equipos submarinos, que no quiso dar su nombre completo, dijo que la empresa solĂa tener unos 50 barcos que transportaban constantemente a los equipos de reparaciĂłn por el lago.
"Hace años, podĂa cubrir una media de 17 fugas al dĂa", dijo, y añadiĂł que ninguna de esas embarcaciones funciona ya. "Más de 20 se han hundido y a muchos otros les faltan piezas".
Pero a pesar de vivir en el epicentro del paĂs con la mayor reserva de crudo del mundo, los residentes de Maracaibo siguen sin poder comprar suficiente combustible. La escasez llegĂł a ser tan grave en 2019 que el gobierno del estado impuso un racionamiento, lo que llevĂł a una desesperada lucha por los suministros.
Los habitantes de Maracaibo son conocidos en Venezuela por su gracia e ingenio. Por eso, bautizaron como “Rápido y Furioso” una particular estrategia para conseguir gasolina, haciendo alusión a la franquicia hollywoodense de “Fast and Furious”.
Justo antes del amanecer, una mañana de noviembre de 2021 en Maracaibo, al menos 100 coches permanecĂan parqueados cerca de una estaciĂłn de servicio. Los conductores acababan de recibir un mensaje que les advertĂa que ese dĂa habrĂa combustible disponible. Como de costumbre, esperaban la señal en sus telĂ©fonos para poder comprar hasta 30 litros de gasolina. De repente, se desatĂł “la furia” y un enjambre de vehĂculos se precipitĂł hacia la estaciĂłn para llegar primeros y tener un cupo, sonando sus ruidosas cornetas a toda velocidad.
Los habitantes del estado de Zulia lamentan tener que buscar combustible en una regiĂłn tan rica en petrĂłleo. Luis, que hasta 2005 construĂa los pilotes que sostienen las plataformas petrolĂferas en el Lago de Maracaibo, recuerda que antes se formaban charcos en el suelo.
"Caminaba descalzo y llegaba con los pies manchados de petróleo", dijo Luis, que ahora trabaja en un taller de reparación de coches. "Brotaba del suelo, como brota el sudor de la piel”.
“Nosotros en el Zulia hemos sostenido a Venezuela. Hemos dado demasiado para lo poco que hemos recibido. Y lo más triste es que estamos parados sobre el petróleo".
InfoLibre, Miami Herald y NDR contribuyeron con la investigaciĂłn.